miércoles, 16 de septiembre de 2009

no hacerse el boludo

Hay veces que uno tiene que tomar partido, ponerse de un lado y mirar desde la otra vereda.
En algunas de esas oportunidades, dar una mirada alrededor y ver que bando eligen los otros, ayuda a definirse: a su lado, nunca.
También ayuda escuchar y ver las mentiras que intentan hacer pasar como verdades.
Y a no olvidar nunca que el comunismo puede no haber sido, que Marx esta muerto y remuerto, pero que la lucha de clases tiene una existencia más real que este café con leche que tengo adelante.
Los recursos, en muchísimos de los casos, son finitos. Eso implica, inexorablemente, digo, INEXORABLEMENTE, que para que unos tengan mucho otros deben tener nada.

Hoy se vota en diputados la nueva Ley de Servicios Audiovisuales y aunque parezca una excentricidad, levanta polvaredas donde se es muy difícil respirar.
Que quede claro: necesitamos una nueva ley que reemplace la que nos impuso la última dictadura, una nueva legislación en general que nos defienda de los monopolios u oligopolios audiovisuales que en estos tiempos mediáticos, son más peligrosos que la gripe A (que por cierto no sería nadie sin ellos) Y no hay mejor tiempo que ahora, porque después no existe. Los 26 años de presiones (porque este no es el primer intento de cambio) lo demuestran.

Necesitamos, en general, que dejen de tratarnos como consumidores, porque no se si a todos pero sí a muchos de nosotros, nos gustaría mejor ser ciudadanos.

Necesito, en particular, que quienes lean estas líneas, sepan que estoy absolutamente convencida de esto que digo, convencida desde el uso absoluto de mi inteligencia (leo, comparo, analizo, evalúo y decido), convencida y angustiada y decidida a creer que no nos pueden ganar siempre, que no pueden decidir siempre los que tienen más plata, que no pueden ser tan burdos en sus mentiras y nosotros como si oyéramos llover.

Vivimos en un país donde hasta el espanto se ha naturalizado.
Hoy se cumplen 33 años de la Noche de los lápices, nombre dado por los mismos asesinos un una muestra de cinismo increíble, de esas 5 noches en que las autoridades máximas de este país (arribadas por un golpe de estado) entraron en la casa de 10 estudiantes secundarios para desaparecerlos. Uno de ellos tenía 14 años.

vamos, repito

adultos que robaron a sus seres queridos, en medio de la noche, un chico de 14 años para torturarlo y luego asesinarlo

En este país, con esas bestias sueltas vivimos. En este país, con esos que con su dinero alentaron a esas bestias, vivimos.

¿Qué es en comparación con eso una discusión embarrada para abrirnos a todos los hoy concentradísimos medios de comunicación?
tal vez nada, absolutamente nada.

Solo que tengo la necesidad de contarles, de definirme delante de todos.

A favor
de que el Congreso Nacional
sancione una nueva
Ley de Servicios Audiovisuales

Perdonen, pero es que cuando una se cree que ciertas premisas básicas estaban ya consensudas, descubrir nuevamente los filos de la noche da mucha impotencia.

"vano intento el de la noche,
los lápices siguen escribiendo"
(pintada en la pared del instituto secundario Raggio)

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